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Recorrer los Picos de Europa y bajar el Sella, las últimas ilusiones de Juan Carlos López Villalobos

Parres Ribadesella Sociedad

El mundo de la piragua despide con lágrimas al palentino Juan Carlos López Villalobos un histórico Vencedor del Sella (1994) y Campeón del Mundo en la especialidad de maratón, fallecido el pasado sábado en Tui (Pontevedra). Sus restos mortales van a ser incinerados en Vigo y en las próximas jornadas se celebrará una misa en Alar del Rey para despedir a su Tritón más internacional. 

El pasado sábado, 24 de agosto, Villalobos compitió en el 53º Descenso Internacional del Río Miño-Campeonato de España de Ríos que se disputó en Tui. Lo hizo en la categoría Máster K1 65-60, prueba que ganó por delante del parragués Maxi Llamedo, otro vencedor del Sella (1984) que hoy estuvo en la COPE recordando cómo fueron las últimas horas del palentino y sus próximos deseos e inquietudes. Coincidieron el viernes reconociendo el río y el sábado tomaron la salida juntos, “aunque su salida fue tan rápida que ni lo ví, metiéndome dos minutos en meta”. 

Villalobos y Medrano en el podio del Sella 1994

Volvieron a encontrarse en el podio para la entrega de trofeos y, tras esta, se fueron a tomar algo porque llevaban años sin verse. “Me contó que tenía mucha ilusión por venir a los Picos de Europa para hacer algún recorrido de montaña y me propuso aprovechar esa visita para bajar juntos el Sella y en eso quedamos”, explicó Llamedo. Se hicieron unas fotos y Villalobos le pidió que se las pasara cuando tuviera ocasión. “Hacia las diez llegamos al hotel y se las envié, pero ya no me contestó, cosa que me estraño mucho. Así quedó la cosa hasta que ayer nos enteramos de su muerte”, añadió un Llamedo emocionado.  

Por ese motivo, todo apunta a que Juan Carlos López Villalobos falleció esa misma tarde-noche del sábado en el interior de su furgoneta, la que había camperizado con gran ilusión tras su reciente jubilación. Según Llamedo era una persona que “se cuidaba muchísimo”. Solía hacer caminatas de hasta 50 km y se subía con frecuencia a la piragua. “Sabía lo que hacía, utilizaba el pulsómetro, sabía lo que era un entrenamiento, tiene medallas de todos los colores en los campeonatos del mundo y de europa de maratón, nunca dejó de hacer deporte. Es una gran pena”, añadió Maxi Llamedo. 

Hoy también recordaba a Villalobos el árbitro riosellano Carlos Piélagos, a quien la noticia de su muerte le ha cogido por tierras castellanas, en Miranda de Ebro (Burgos), donde mañana arbitrará varias competiciones. “Ayer me pasé por el Club Antares Miranda, donde también era muy popular y había bastante tristeza”, afirmó. Piélagos recordó aquella típica estampa de Los Tritones del Pisuerga a finales del siglo pasado, “con Villalobos y Medrano como principal estandarte a bordo del coche pintado a rayas verdiblancas, los colores del club de Alar del Rey, cargado de piraguas, una época muy buena para ellos, una de las mejores K2 del momento”, recordó. 

Luis Medrano Miguel y Juan Carlos López Villalobos

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