Lo ocurrido este sábado en los acantilados de Cuerres, en el concejo de Ribadesella, ha sido de traca. Un grupo de personas celebraba una parrillada en el área recreativa de Cuerres. La fiesta fue aumentando de volumen y con la euforia alcanzada, uno de los integrantes decide lanzarse al mar desde los acantilados. Hasta el agua mas de 20m de altura.
Sus compañeros de parrillada llamaron entonces al 112 Asturias y movilizaron a todo un equipo de rescate y rastreo: Helicóptero de los Bomberos de Asturias, el equipo de bomberos de Llanes, la lancha de Cruz Roja de Ribadesella, la Guardia Civil y la Policía Local riosellana.
Al final el intrépido parrillero salió nadando por su propia cuenta por la playa de Guadamía. La Guardia civil pudo constatar a pie de playa que el hombre se encontraba en perfecto estado.
El helicóptero regresaba a su base poco antes de las nueve de la noche. Tanto las personas que a esas horas se encontraban en la playa como las que disfrutaban del día por los Bufones de Pría fueron testigos de todo el dispositivo y de la imprudencia y excentricidad cometida por esa persona.