La Peña Sportinguista Pleamar de Ribadesella ha celebrado su 17º Aniversario con la tradicional espicha fin de temporada en El Ancla, su sede oficial. Este año contaron con una visita muy especial, la de Manu el hijo de Manolo Preciado, a quien los sportinguistas siguen añorando y recordando con devoción al ser el entrenador que subió al equipo a Primera División en la temporada 2007-2008.
Ahora lleva seis temporadas en Segunda y la que viene será la séptima al no superar con éxito la fase de promoción, en la que fue eliminado por el Español, el mismo que eliminó a su gran rival el Real Oviedo. Pero con la celebración de ayer han demostrado que ya han olvidado ese mal trago y sólo miran al futuro con ambición.
A esta última celebración también asistió el presidente de la Peña el Sueve de Colunga, Germán Alonso, además de un buen número de socios.