El Ayuntamiento de Ribadesella acometerá una obra de emergencia en el campo de Oreyana para consolidar uno de los muros y evitar su colapso. Ante este problema estructural, el equipo de Gobierno pretende actuar con rapidez para no tener que precintar de la vieja instalación deportiva. De hecho, el alcalde Ramón Canal, dijo en el en el último pleno que, por razones de seguridad, “si hay que precintar el campo se precinta”. La idea es que no sea necesario llegar a ese punto ya que en estas fechas el campo acoge competiciones vinculadas al Sella Cup que se organizan junto a otros municipios de la comarca con la participación de mas de 1.500 niños. El pasado fin de semana se celebró la competición femenina.
Según explicó el concejal de deportes, Luis Fuentes, el tramo de muro afectado corresponde con la grada norte, la zona mas próxima al aparcamiento interior del campo de la grada principal. Son unos 50 metros longitudinales de muro los que están completamente sueltos de la grada y “corren el riesgo de colapsar o caer sobre el camino que también da acceso al pueblo de Collera”. Ante su inestabilidad, la zona ha quedado balizada con cinta de seguridad para evitar que nadie se siente en ese lugar ni se apoye en el muro.
El Ayuntamiento ya se ha puesto en contacto con varios contratistas del concejo para que aporten soluciones y presupuestos. Todo apunta a que, en principio, se llevará a cabo una actuación provisional, “colocando un zuncho que asegure esa zona de la grada”, aunque según algunos expertos, la solución definitiva debe pasar por la construcción de un nuevo muro. “Esperamos solventarlo en breve, cuanto antes, aunque en esta época los contratistas están muy ocupados”, añadió el concejal.
Al tratarse de una obra de emergencia no presupuestada el edil hablará con el servicio municipal de intervención para buscar la forma de financiación. “Los presupuestos son fabes contades, así que de algún lado tendrá que salir”, añadió Fuentes. En el campo de Oreyana está proyectada la instalación de una portilla corredera en la zona de vestuarios para acceder con las porterías al campo sin saltar la valla, “obra que ya está adjudicada y se realizará en breve”. También está pendiente el cambio del marcador electrónico y la sustitución de los alógenos que se han fundido en el sistema de iluminación del campo. “De los 36 focos que tiene Oreyana hay cuatro o cinco que no funcionan, pero son bastante caros y ahora la urgencia la tenemos en el muro”, aseguró Luís Fuentes.
El Ayuntamiento de Ribadesella también pidió una subvención al Programa Leader para sustituir esos alógenos por luces led, lo que permitiría un ahorro en el consumo energético, “pero no nos la han aprobado ya que es una inversión bastante importante, había poco dinero y muchos ayuntamientos solicitando”. El concejal lo volverá a intentar.
Tramo de grada balizada en la zona donde el muro está inestable
