Hoy hemos despejado una duda que nos mantenía inquietos desde que conocimos la noticia. Este año, el Gobierno del Principado entregará cinco Medallas de Asturias y una de ellas será para Consuelo Vallina, pintora y grabadora nacida en Ribadesella. Desde que conocimos este hecho hemos indagado sobre su existencia, pero nadie nos ha facilitado información alguna. Así, acudimos a la mejor fuente de información, la propia interesada.
Consuelo Vallina vino al mundo el 26 de diciembre de 1941 en la casa de su abuela materna, una casona del siglo XVIII situada en Sotu (Ribadesella). Sus padres vivían por aquel entonces en Noreña, pero cuando se acercó el día del parto su madre decidió hacerlo “en casa de mi abuela con su apoyo y la asistencia de una partera o comadrona, porque en aquellos tiempos no había los hospitales de ahora”. Aunque nació en la fecha señalada, su padre la inscribió en el registro con unos días de retraso, el 1 de enero de 1942, fecha que aparece en su Documento Nacional de Identidad.
La familia Vallina González se mantuvo en Noreña hasta que Consuelo cumplió los ocho años de edad. A partir de ahí fijó su residencia en Oviedo, de donde nunca mas se ha marchado. “Por eso siento gran afecto por los tres sitios”, afirmó. En primer lugar siempre sitúa el concejo de Ribadesella, porque aquí nació y pasó gran parte de su infancia y juventud. “Fuí mucho de niña a la casa de la abuela, a la playa de Santa Marina y con los años a las fiestas y verbenas. Fuí en tren fluvial a Arriondas, andábamos en bicicleta, fueron unos años geniales”, recordó. Hace tiempo que no ha vuelto por Ribadesella, porque ya no le queda familia en el concejo y sospecha que tampoco amigos, “porque pasaron muchos años y te vas distanciando”. Entre sus preferencias situó a la ciudad de Oviedo en segundo lugar, “porque aquí llevo viendo muchos años y es una ciudad en la que me encuentro muy agusto”. Y en tercer lugar, Noreña, porque allí vivió menos tiempo.
Aunque acaba de cumplir 82 años, Consuelo sigue pintando y exponiendo porque lo suyo es “vocacional y mientras tengas capacidad lo sigues haciendo”. No es una pintora figurativa. Lo suyo es el arte abstracto. Desde 1978 ha expuesto su obra de forma individual en Asturias, España, Polonia, Italia y Estados Unidos. Colgó en la Alex Gallery de Washington, en la Galería Venecia Viva de Venecia o en Tampa (Florida).
Cuando el Presidente del Principado, Adrián Barbón, anunció las Medallas de Asturias 2024, dijo que Consuelo es una “creadora, plástica, pintora, grabadora, representante del sector artístico que tiene trayectoria de largo recorrido, formada desde una familia humilde que ha sabido desarrollar el valor de lo artístico y cultural, así que ya tocaba que fuera Medalla de Asturias”. Consuelo no se la esperaba, pero afirmó que se siente “agradecida y emocionada”. “No sé si es merecida, pero sí agradecida”, añadió.
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