La realización de pruebas PCR a profesores y trabajadores no docentes y la necesidad de conocer la evolución de la pandemia del coronavirus en las próximas semanas ha llevado al Gobierno del Principado de Asturias a retrasar unos días las fechas previstas para el inicio del curso escolar, que tendrá carácter semipresencial entre tercero de la ESO y el Bachillerato.
De esta forma, el curso se iniciará el día 22 de septiembre para Infantil y Primaria en lugar del día 10, como estaba previsto, mientras que en Secundaria y Bachillerato será entre los días 28 y 29 -inicialmente el 14- y en Formación Profesional arrancará el día 30, en lugar del 18. También se mantendrán los 175 días lectivos sin alterar el periodo vacacional.
Así, los alumnos de hasta Segundo curso de la ESO tendrán clases presenciales diarias y estables de no más de veinte alumnos y, a partir de ahí, el resto de estudiantes acudirán al aula de forma rotatoria y en días alternos de manera que solo asista la mitad de los integrantes del curso mientras que el resto lo hará a través de medios telemáticos.
Estas medidas, que se aplicarán tanto en la enseñanza pública como en la concertada, obligarán a contratar a 860 profesores más lo que supondrá «un esfuerzo económico muy importante» cuyo coste se cifra en 31 millones de euros, una cifra que supera la aportación anunciada por el Gobierno central destinada a la educación para combatir la pandemia.
Las características del nuevo curso han sido aprobadas hoy por el Consejo de Gobierno tras el acuerdo alcanzado ayer entre el Ejecutivo central y las comunidades autónomas que contempla el uso obligatorio de mascarilla en los centros partir de los seis años, que las clases sean presenciales al menos hasta segundo de Secundaria, la garantía de la distancia interpersonal además de la higiene de manos y la ventilación de los espacios.
Esta semipresencialidad no afectará a algunos colegios e institutos de la zona rural en los que la cifra de alumnos está por debajo de veinte y los servicios de transporte y comedor se prestarán con normalidad cumpliendo las recomendaciones sanitarias que obligarán, por ejemplo, a otorgar un asiento fijo a cada alumno en el autobús que utilice en el desplazamiento.
