El concejal de turismo y deporte del Ayuntamiento de Llanes, Iván García, ha sido víctima de una agresión física esta mañana en las inmediaciones de la Casa Consistorial. El agresor, un vecino del concejo, fue detenido en grado de atentado contra la autoridad al tratarse de un concejal electo en el ejercicio de sus funciones como representante público. Le dio dos puñetazos, y tras el segundo, recibió una patada en la boca del estómago, requiriendo de atención médica. El concejal se recupera positivamente.
Según pudo saber la Cadena COPE, el motivo de la acometida está relacionado con el uso del gimnasio municipal. El agresor, que suele frecuentar esas instalaciones, no estaba muy contento con los horarios de apertura. Se quejó en varias ocasiones, pero al no conseguir resultados, hace unos días agredió al hermano de Iván García y esta misma mañana al propio concejal.
A través de un comunicado, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Llanes mostraba su “repulsa y preocupación” con lo ocurrido y manifestaba su “enérgica condena”. Sus compañeros en el cuatripartito le trasladaron su solidaridad con García, deseándole una “pronta recuperación”. También agradecieron públicamente “las múltiples muestras de interés y de cariño que en el ayuntamiento se están recibiendo a lo largo de estas últimas horas”.
Entre ellas las del Partido Socialista que, en otro comunicado, manifestaba su “condena radical” y reprobaba el hecho, que calificó como “puntual y aislado, y absolutamente injustificable”. “La tolerancia y el respeto a las personas está por encima de cualquier otra consideración, y por supuesto del debate y de la legítima discrepancia política. Impedir mediante el uso de la fuerza o la violencia el ejercicio de la actividad pública merece la mayor de las condenas”.
Desde la Agrupación Socialista y el Grupo Municipal, han trasladado su solidaridad al edil en nombre de todos los socialistas y le han deseado una pronta recuperación. Al mismo tiempo han manifestado su deseo de que la precampaña y campaña electoral se mantenga dentro de los cauces de la absoluta normalidad democrática.
De todas formas, todo apunta a que esta agresión no ha tenido nada que ver con la precampaña electoral.