Una bolla preñada elaborada en el barrio de La Cuesta ha sido la ganadora del IV Festival de la Borona de Ribadesella, celebrado este sábado en la Plaza Nueva. De las dieciséis preparaciones presentadas a concurso, la mejor para el jurado fue la ‘Morris’, la Javier Patiño Llera, una borona confeccionada sólo con harina de maíz y después de sólo siete horas de cocción, en una antigua lata de dulce de membrillo. Como premio, 200 euros en metálico y dos noches de hotel.
El segundo premio, dotado con 100 euros y una cena para dos personas en un restaurante del concejo, fue para Felipe Llerandi, el parragués vecino de Bode que había ganado la primera edición. Un serie de problemas físicos le impidieron estar presente en el festival, aunque estuvo bien representado por Alba Pascual. El tercer premio (50 euros y un bono para dos personas en el Spa del Gran Hotel del Sella) también se quedan en Ribadesella, en la borona de Laura Iglesias González.
En esta ocasión han concurso bollas procedentes de Amieva, Cangas de Onís, Parres y Ribadesella. También se había inscrito una elaboración del concejo de Llanes, aunque al final no hizo acto de presencia. El jurado, integrado por miembros de las asociaciones de Hostelería y Comercio, Amigos de Ribadesella, Tertulia El Garabato y Banda de Gaitas, se inclinó por una borona preñada de chorizos, costillas y panceta. Es la segunda que Morris elabora en su vida, aunque su especialidad son los panes rellenos. La primera bolla la preparó el año pasado para un grupo de amigos. “Tanto les gustó que me animé a presentarme al concurso”, explicó. Su truco, “iniciar la cocción a 200 grados, bajando de veinte en vente cada dos horas, dándole un último toque con la temperatura inicial”, añadió.
El IV Festival de la Borona de Ribadesella ha servido para acabar con la hegemonía hasta ahora demostrada por las elaboraciones de Bode, ganadoras en las tres primeras ediciones con Felipe Llerandi (2016) y Jesús Pascual (2017 y 2018). Este último se quedó este año sin premio, pero contento por haber participado y dispuesto a seguir haciéndolo en futuras ediciones.
Las dieciséis boronas presentadas a concurso fueron desgastadas gratuitamente por el público asistente. El festival contó también con un mercadillo de productos riosellanos además de mucho folclore y colorido, el que aportaron la Bandina de Gaites Ribeseya, el Grupo de Baile El Corveru y el cuarteto de música folk P’Amusquis. Un sábado gastronómico que se cerró con la actuación del grupo folk riosellano Corquieu, incluido en el programa de la 40º Selmana de les Lletres Asturianes.
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