Efectivos de la Dirección General del Medio Natural han liberado en las últimas horas el ejemplar de alimoche rescatado el 31 de agosto pasado en Llanes, en las inmediaciones de Meré. Durante todo este tiempo, el pollo ha permanecido en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre del Principado de Asturias (CRFS) recuperándose del traumatismo que tenía en el ala derecha.
Allí recibió atención veterinaria hasta curar la luxación en la articulación húmero-cubital y recuperó su movilidad y funcionalidad correctas, permitiéndole realizar correctamente vuelo batido en voladero. Una vez que las condiciones meteorológicas han sido favorables para que existieran corrientes térmicas que permiten a estas aves planear, el ejemplar fue liberado.
En su reintroducción al medio, el alimoche lleva consigo un emisor GPS con el objetivo de hacer un seguimiento continuo de su evolución, incluyéndolo como un componente más en la Red Centinela de Vigilancia contra el Veneno desarrollada por el Gobierno del Principado de Asturias, que cuenta ya con más de 30 ejemplares de distintas especies radiomarcados.
Ahora sólo queda desear suerte a este joven ejemplar de alimoche para que sea capaz por si mismo de salir adelante y pueda recorrer tanto las montañas cantábricas como el continente africano a donde suelen migrar hacia el mes de septiembre.
El alimoche (Neophron percnopterus) es un ave carroñera de tamaño mediano, que se característica por el plumaje blanco y negro y la cara amarilla de los individuos adultos; mientras que los pollos y juveniles presentan distintos tonos de plumaje pardo. Su periodo de cría se da entre marzo y agosto, poniendo generalmente un único huevo. Esta especie se encuentra incluida en el Libro Rojo de las aves de España en la categoría de “En peligro”.