La Coordinadora Ecoloxista d’Asturies ha denunciado la forma en la que el Principado está autorizando quemas controladas en la región, “en época de cría, afectando a aves y mamíferos”. El colectivo ha reclamado a la Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial que corrija su decisión retrasando las autorizaciones al otoño pues es en “los meses de octubre a marzo cuando deben realizarse con precaución y bajo condiciones específicas para minimizar el impacto en la fauna silvestre”.
Como ejemplo de lo que no se debe hacer, la Coordinadora ha destacado lo ocurrido ayer en Las Coronas (Parres), donde se llevó a cabo una quema en pleno mes de abril, “en plena época de cría en la que las especies son muy vulnerables, con el correspondiente impacto para la fauna y para susto de los vecinos que vieron cómo Arriondas se llenaba de humo”, afirma en un comunicado.
Aunque las quemas controladas pueden ser una herramienta útil para el manejo de pastizales y la prevención de incendios, la coordinadora cree que deben utilizarse como último recurso ya que “generan gran perturbación en los ecosistemas y grave erosión, poniendo en peligro los suelos para las próximas generaciones”.
En el mismo comunicado ha reclamado más “coherencia y responsabilidad” a la Administración autonómica como responsable de la custodia del territorio, “protegiendo la biodiversidad, los suelos y el clima”.
AMPLIACIÓN 02 DE JUNIO DE 2025.- Según informa este martes la Coordinadora Ecoloxista, la Fiscalía de la Comunidad Autónoma del Principado de Asturias ha abierto diligencias sobre su denuncia realizada en el mes de abril pasado. Los hechos denunciados por la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies fueron varias quemas autorizadas por dicha Consejería en abril y mayo en diferentes montes de los concejos de Parres, Cudillero y Pravia.
Estas quemas tienen por objetivo la regeneración de pastos y están reguladas por varias resoluciones de la propia Consejería, «resoluciones que se incumplieron de manera flagrante, ya que se quemó una superficie muy superior a la autorizada». A modo de ejemplo, en el concejo de Parres se autorizó una quema en campera, que permite quemar una superficie máxima de doscientos metros cuadrados, «y se quemaron cerca de cuarenta mil metros cuadrados, doscientas veces la superficie autorizada», dice la coordinadora en un comunicado. Entre los concejos de Cudillero y Pravia se quemaron esos días unas sesenta hectáreas de monte.