El día de San Juan del año 2020 quedará grabado en la memoria de muchos riosellanos por ser totalmente diferente a todos los demás. El prau de la fiesta, en plena ría del Sella, se quedaba ayer vacío, pero no completamente. Sabemos que siete vecinos se reunieron allí para disfrutar de una cena campestre, aunque sin foguera. Otros eligieron la explanada del Farín, en el Paseo de la Grúa, para encontrar suficiente entonación festiva.
Y alguno mas se aventuró esta mañana de miércoles a participar en la primera Marcha de San Juan por la costa oriental del concejo. Este grupo de valientes partió de la Plaza del Ayuntamiento para detenerse a comer en el área recreativa de Castru Arenes, en la localidad de Cuerres.
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