El Ayuntamiento de Ribadesella detecta un incremento del vandalismo juvenil durante las primeras noches de este verano. Según el alcalde, el socialista Ramón Canal, “estamos teniendo unas noches bastante movidas con considerables destrozos de todo tipo”.
Un verano mas, los vándalos han destrozado la caseta de salvamento de la playa de La Atalaya. A su vez, las sillas de vigilancia ubicadas sobre el paseo marítimo de la playa de Santa Marina fueron arrojadas al arenal y en ese mismo paseo “arrancaron varios bancos que colocaron sobre la caseta de la biblioplaya”.
Debido a tanto vandalismo la Guardia Civil ha presentado ya alguna denuncia contra varios jóvenes “atrapados en plena faena destrozando el mobiliario”. “La verdad es que las noches están siendo complicadas este verano”, añadió Ramón Canal.
A todo ello se une la falta de efectivos policiales. La Policía Local continúa sin servicio nocturno y lo que es peor, “tampoco podemos contratar mas agentes o auxiliares porque nos lo impide la legislación vigente”, se quejó el alcalde. A su vez, la Guardia Civil tampoco tiene efectivos suficientes para cubrir los catorce concejos de la comarca.
Ramón Canal también confirmó que en Ribadesella ya se procedió al cierre de “algún local en los primeros días por superar el aforo permitido”. A su vez, se están comprobando los horarios de cierre y se está advirtiendo de sanciones a todos aquellos que lo incumplen.