Las obras de construcción de la nueva glorieta en Vega de los Caseros (Parres) avanza a buen ritmo. De hecho, han entrado en su recta final porque ya se circula con normalidad por el interior de la rotonda, en plena carretera N-625. La antigua raqueta ha desaparecido. Se trata de una intersección que no solo da acceso al pueblo parragués, sino también al núcleo rural de Villanueva de Cangas y al Parador Nacional de Turismo de Cangas de Onís.
La actuación ha contado con un presupuesto 325.000 euros. La nueva glorieta cerrada dará fluidez y seguridad a la circulación de vehículos y se evitarán las esperas para cruzar la carretera. Los vecinos de ambos pueblos confían en que se reduzca la siniestralidad.
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