
El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) anunciaba este lunes que ya ha formalizado por un importe de 6,5 millones de euros el contrato de obras para la ejecución del proyecto de reparación y ampliación de la estructura del puente sobre el río Sella en el kilómetro 3,000 de la N-632, el puente de Ribadesella.
En el mes de julio pasado ya informábamos que el Mitma tenía adjudicatario, pero el contrato no se ha formalizado hasta ahora, cinco meses después. Ya saben, las cosas de palacio van despacio.
Las actuaciones proyectadas tienen por objeto la reparación y ampliación del puente sobre el río Sella y el acondicionamiento de los accesos al mismo, a fin de adecuar la obra a los requisitos de servicio actuales y a la normativa en vigor.
Construido en 1940, el puente consta de un total de 14 tramos isostáticos apoyados en 13 pilas y dos estribos extremos. La calzada tiene un ancho total de 6 metros y sendas aceras a cada lado de un ancho de 1,20 metros, además del espacio ocupado por las barandillas, completando así un tablero actual de 8,96 metros de ancho total.
El estado de ese tablero desaconsejaba la reparación del mismo para la posterior ampliación, dado su avanzado deterioro y el elevado grado de incertidumbre que comportaría el alcance de la intervención (lo que incluye la valoración del precio y del plazo) y la propia calidad de los trabajos. Además, la actuación prevista «da, incomparablemente, mejores garantías de vida útil que la reparación de un tablero de hormigón de más de 80 años que, aun así, debe reconocerse que se ha comportado muy bien a pesar de estar en un medio tan agresivo como ese», afirma el Mitma en su comunicado.
Por esa razón se ha optado por la demolición del tablero y su sustitución por uno nuevo de similares características al existente, pero de mayor envergadura.
El ensanche total del nuevo tablero es de unos 3 metros con relación a la situación original, pasando de 9 a 12 metros, lo que permite incrementar el ancho de los carriles y dotar a la plataforma de unas aceras generosas que facilitan el tránsito peatonal por el mismo, en un entorno de gran belleza que invita al paseo y la contemplación, además de servir de paso de un lado al otro.
Antes de iniciarse estos trabajos, se procederá al refuerzo de la cimentación existente mediante la ejecución de micropilotes y, además, deberán repararse los estribos y las pilas existentes.
Será preciso también dar continuidad a la ampliación de la plataforma más allá de la estructura propiamente dicha, definiéndose una sección similar para las zonas de acceso al mismo en ambos márgenes del río Sella. En la zona situada al este del puente, que conecta con la rotonda que organiza los accesos a la localidad de Ribadesella desde la carretera N-632, se ha previsto una reordenación del tráfico peatonal para dar continuidad al citado tráfico desde el puente sobre el Sella.
Actualmente existen, a ambos lados de la glorieta, accesos peatonales mediante escaleras y rampas que será necesario retranquear para dar continuidad a las nuevas aceras, de mayor anchura. Estos nuevos accesos se adecuarán a la normativa vigente para que sean accesibles para personas con movilidad reducida (PMR).
Existen servicios afectados por las obras (telefonía, alumbrado, abastecimiento y red de gas) que deberán ser trasladados provisionalmente durante las obras y repuestos en su posición definitiva una vez se finalicen los trabajos.
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