La nieve y el hielo siguen presentes en las carreteras de la comarca. De hecho, a esta hora continúa cortada la carretera PO-2 que une Beleño con San Ignacio, el acceso a Ventaniella (PO-1) y la CO-4 entre Covadonga y Los Lagos, en Cangas de Onís.
Pero la gran novedad con la que amanecíamos este jueves es el corte preventivo por alto riesgo de aludes de la AS-264, entre Tielve y Sotres, en el concejo de Cabrales, el tramo donde se han construido cuatro viseras antialudes. Por ese motivo, los vecinos de Sotres no dan crédito a la medida adoptada.
Raquel López aseguraba esta mañana que los vecinos “tenemos que salir y entrar del pueblo todos los días, así que lo que hay que hacer es limpiar para que podamos hacerlo con el riesgo que todos conocemos”. Esta vecina solo estaría de acuerdo con el cierre preventivo anunciado “si nos aseguran que hoy van a bajar todos los aludes previstos, pero mucho me temo que no será así”. Además, mañana tiene que estar a las nueve de la mañana en Arriondas y “aún no sé si me van abrir la carretera o no, hay cosas que no se entienden”, añadió.
Saben que las viseras construidas no cubren la decena de neveros por donde bajan aludes, aunque se da por hecho que las viseras fueron levantadas en los puntos mas peligrosos por lo que la carretera es a día de hoy mas segura que antaño. Sin embargo, nunca antes les habían aplicado un cierre preventivo como este. “Los que vivimos en Sotres sabemos que con nieve es un riesgo, pero tenemos que salir y hacer cosas fuera del pueblo”, añadió.
Los que no bajan son los niños de Sotres, que se han quedado sin cole desde que comenzó esta primera nevada del año. Algunos como David aprovecha la ocasión para jugar en el parque infantil de la localidad, que aunque esté completamente cubierto de nieve no le supone ningún problema.