El pasado mes de marzo los representantes de los gobiernos asturiano, cántabro y gallego en el Comité de Flora y Fauna Silvestres retiraron su apoyo al Proyecto de introducción del Pigargo en Asturias. A raíz de esta decisión, la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies solicitó al Principado la captura y retirada de los pigargos liberados hasta ese momento, lo que todavía no se ha hecho.
«Si se ha considerado que la introducción de la especie no es viable, debido entre otras causas a las probables interacciones negativas con la fauna autóctona, deberían capturarse las aves liberadas hasta el momento para evitar esas interacciones. Nuestra petición no ha sido tenida en cuenta y a día de hoy, cinco meses después, las aves siguen libres con el impacto que supone», afirma el colectivo en un comunicado.
Desde la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies ya mostraron en su momento a los gobiernos asturiano y español su completa oposición al proyecto de introducción de esta especie. El pigargo europeo (Haliaeetus albicilla) es un águila de gran tamaño que se alimenta de peces, aves y mamíferos y que no está amenazada. Por el contrario su población está en aumento a lo largo de su enorme área de distribución, que se extiende por Europa central y occidental y la mayor parte de Asia.
Además, según la Coordinadora Ecoloxista no hay ninguna evidencia de que el pigargo europeo haya sido una especie reproductora en España (Libro Rojo de las Aves de España, SEO BirdLife 2021). «Su presencia es accidental en nuestro país y siempre en época invernal, por lo que su introducción no obedece en modo alguno a criterios de conservación de la especie», afirman. Por el contrario, entienden que la presencia en este entorno de un «superdepredador» como el pigargo puede ocasionar «graves problemas a la conservación de especies amenazadas de nuestra fauna, bien por la competencia directa con ellas o bien por depredación sobre las mismas».
La promotora del Proyecto Pigargo, la asociación GREFA, ha declarado recientemente que no se han producido interacciones entre los pigargos liberados y especies protegidas. Pero, según la Coordinadora, «esa es una afirmación carente de todo rigor puesto que las aves vuelan libres y se desconoce lo que hacen en cada momento». De hecho tienen noticia, documentada con las fotos que se acompañan, de un encuentro “poco amistoso” entre Mónica, uno de los quebrantahuesos liberados por la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos y uno de los pigargos introducidos.
El Proyecto Pigargo se está llevando a cabo con aves procedentes de Noruega que son liberadas en el concejo de Ribadedeva. En la actualidad hay más de veinte pigargos liberados. «Como hasta el momento presente no tenemos noticias de que se haya actuado en el sentido de capturar a estas aves, volvemos a reiterar nuestra petición al Principado, solicitando también el desmantelamiento de las instalaciones que el proyecto tiene en la costa de Pimiango (Ribadedeva) en suelo de Costas», añade el colectivo en su comunicado.