Efectivos de la Comandancia de la Guardia Civil de Gijón, han procedido a la toma de manifestación en calidad de investigados de dos menores como supuestos autores de un delito continuado de daños causados en la localidad de Ribadesella.
Con fecha 13 de octubre se recogía la primera de un total de 11 denuncias presentadas en las dependencias de la Guardia Civil de Ribadesella por daños en propiedades privadas, inmuebles y vehículos consistentes en pintadas tipo graffitis realizados con rotuladores de diferentes colores y con pinturas en spray, en las que se podía leer una especie de firma en todas ellas claramente identificativa: “TRAPIS”.
Las pintadas se repetían, en diferentes colores y tamaños, afectando tanto a fachadas de edificios, como a vehículos aparcados en la vía pública, mobiliario urbano e incluso en la capilla de Santa Ana, que data del siglo XVII, causando gran malestar y preocupación en los habitantes de la localidad riosellana.
Las investigaciones permitieron identificar a un grupo de jóvenes vecinos de la localidad como supuestos autores de los hechos denunciados, a través del rastro dejado por los mismos tanto en la localidad como en sus redes sociales, donde alguno de ellos se identifica como “elchicolostrapis”.
Con el foco puesto en este grupo, en la noche del pasado 28 de octubre, en horario cercano al toque de queda establecido, la Guardia Civil de la localidad identificaba a tres jóvenes, dos de los cuales portaban consigo un rotulador grueso permanente y un bote de pintura en spray color púrpura.
Tras proceder a la intervención de los efectos mencionados, se pudo comprobar, que las pinturas coincidían con las utilizadas en algunos de los grafitis denunciados.
Finalmente, se procedió a la toma de manifestación en calidad de investigados de los dos jóvenes, menores de edad, que portaban dichas pinturas como supuestos autores de un delito continuado de daños.
DECLARACIONES DEL ALCALDE DE RIBADESELLA.- Entre los denunciantes también se encuentra el Ayuntamiento de Ribadesella que salió en defensa del mobiliario urbano dañado y destrozado por los vándalos del spray. El alcalde llevaba varias semanas en contacto con el teniente de la Benemérita para “hacer un seguimiento y parece que han dado resultado sus pesquisas”, afirmó Ramón Canal. Ahora espera que el juez correspondiente tome una decisión que permita “acabar con esta práctica tan deplorable para Ribadesella”.
De momento, el Ayuntamiento solo tiene valorado el coste de la limpieza de algunos espacios públicos que se han visto afectados por las pintadas. “Superan con creces los dos mil euros, pero hay otros casos en los que no se puede eliminar como bancos o señales que no se pueden recuperar y habrá que cambiar, así que la cuantía puede ser mucho mas cuantiosa”, explicó Canal. Pero además, como también se registraron daños en patrimonio cultural, “las cosas se les pueden complicar un poco a estos chicos”, añadió el alcalde.
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