A la vista de la evolución de los niveles de los ríos, provocada por las recientes precipitaciones, y ante una posible evolución desfavorable en sus caudales, la Consejería de Presidencia procedía esta mañana a la activación del Plan Especial de Protección Civil por Riesgo de Inundaciones en fase de preemergencia en todo el Principado de Asturias. Durante esta fase, se realizará un seguimiento de los parámetros hidrológicos y se mantendrá contacto con los organismos encargados de facilitar información necesaria para seguir su evolución.
Entre los puntos conflictivos del Oriente de Asturias, hoy destacamos el del río Cares a su paso por las localidades de Mier y Niserias, en Peñamellera Alta, donde el caudal superó los niveles de prealerta a las 8:30 horas de este martes. Según Javier López Gonzalo, propietario de Casa Julián, el río “baja muy alto, con dos metros por encima de su nivel normal en el embalse. Ahora mismo tenemos el agua a escasos 40 centímetros del salón del hotel”, afirmó. Y lo peor es que, “a partir de ahora es imprevisible lo que pueda llegar a ocurrir”, añadió.
Sin embargo, la cota mas alta en el río Sella se alcanzó a las 17:45 horas de ayer a su paso por la localidad de Arriondas, donde este mediodía la situación había mejorado considerablemente. Los habitantes de la capital del concejo de Parres siguen mirando con preocupación el nivel de los ríos Sella, Piloña y Chico, “aunque creo que esta vez no hay motivos para alarmarse”, afirmó Titu Manzano. No obstante, su crecida ha paralizado provisionalmente las obras contra inundaciones que se están ejecutando en la localidad.
En La Mediana de Ribadesella la situación se ha estabilizado y los agricultores creen que esta vez el Sella no se saldrá y podrán salvar sus cultivos. Por ejemplo, las 40.000 lechugas que tiene plantadas Roberto Capín en sus invernaderos. De todas formas, aunque el río no se haya desbordado, buena parte del estuario permanece inundado “porque los canales y sangraderas están obstruidas y no nos dejan limpiarlas”, afirmó Capín.
Este agricultor riosellano lamentó la situación que presenta el río ante la pasividad de las Administraciones competentes. “Ni se está haciendo nada ni tenemos esperanza de que se haga porque ninguna quiere hacerlo y tampoco nos dejan hacer nada. Es mas, Costas sigue sin recoger la basura que se extrajo de la Vega del Sella tras la histórica riada de 2010. Ahí sigue amontonada oculta por la maleza”, censuró. También pidió actuar sobre los islotes del río y sobre los diques naturales de contención que el mismo Sella se está llevando en cada crecida.
Desembocadura del río Sella en la villa de Ribadesella con un cielo amenazante
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