Las concejalías de consumo de Ribadesella y Llanes han hecho un llamamiento público al conjunto de la población para que los habitantes de sus respectivos municipios tengan en cuenta al comercio local en sus futuras compras para ayudarle a salir de la crisis económica que se avecina como consecuencia de la crisis sanitaria del coronavirus (Covid-19).
Se trata de una llamada de atención a todos los ciudadanos sobre la idea de que tenemos el derecho y el deber de exigir un consumo de productos y servicios seguros, en un mercado transparente, competitivo y respetuoso con nuestros derechos.
Pero también debe servirnos para meditar sobre el papel que jugamos los consumidores en un mercado tan globalizado, y si el actual modelo de consumo es lo que más conviene a nuestro pueblo, a nuestro concejo, o a nuestra región.
Y es que desde hace años el comercio de proximidad está sufriendo de forma especialmente dura los efectos de la crisis económica, traduciéndose en muchos cierres de locales. Por otro lado, el tejido de comercio local tiene que luchar, en desigualdad de condiciones, contra una fuerte competencia de otros formatos comerciales tales como las grandes superficies o las compras online. Pero es que además, el comercio local se está viendo seriamente afectado como consecuencia de las actuales alertas sanitarias para tratar de evitar la propagación del COVID-19.
Ambos concejales recuerdan que el comercio de proximidad tiene “una gran importancia desde el punto de vista urbano, social, económico y creador de empleo, suponiendo un elemento fundamental en la dinamización de la economía local”.
Además, el comercio cercano presenta ciertas ventajas frente a otros formatos comerciales como la reinversión de las ganancias en el entorno más próximo o la generación de ciclos de distribución más cortos, lo que supone un menor impacto ambiental, y por lo tanto, un modelo de consumo más sostenible.
“La presencia de locales abiertos, de comercios de proximidad, hacen que nuestros pueblos sigan siendo centros neurálgicos de vida”, añaden.
Noticias relacionadas
El Principado exige el cierre de bares, restaurantes y negocios durante dos semanas para controlar el coronavirus
La OMIC de Ribadesella recibió 1.458 consultas y tramitó 241 denuncias y reclamaciones durante 2019