El colectivo ganadero del oriente de Asturias vuelve a estar en pie de guerra. El motivo, el de siempre, los daños del lobo a la cabaña ganadera. Desde que se abrieron los pastos altos de montaña las bajas son constantes, prácticamente diarias.
Según denunció Alberto Suárez Arduengo, “en los puertos de Amieva, en la zona de Toney y alrededores, llevamos 22 animales muertos entre novillas, xatos y vacas en cuestión de un mes”. Los ganaderos son alrededor de media docena, aunque también “hay ataques en Ponga y en Cangas, por todos los lados”.
Dada la situación el colectivo ha convocado una concentración de protesta para el próximo viernes, 17 de julio, a las 11:00 horas en Cangas de Onís, lugar en el que hoy se reunían algunos alcaldes de la comarca de Picos para analizar el problema y mostrar su apoyo incondicional al colectivo ganadero, a sus propios vecinos. La concentración será ante la Casa Dago y ante la oficina comarca de la Consejería de Medio Rural.
Según Suárez Ardiengo, el problema sigue creciendo. “El lobo acabó con la reciella y ahora seguimos con el ganado mayor, con lo que se les pone por delante. Cuando no las comen las despeñan, cuando tienen jabalíes, rebecos y lo que quieran a patadas. Pero ahora les ha dado por los xatos y no paran. Esto antes solía pasar en agosto, pero ya nos están desbordando en julio”, añadió.
Este ganadero del concejo de Sames (Amieva) pidió que se cumpla el Plan del Lobo. “Esto no pasa por quitar uno o dos lobos, cuando llevan cinco años sin quitar ninguno. Tienen que organizarse controles serios de verdad”.
CONSEJERO.- A este asunto se refería hoy el Consejero de Medio Rural, Alejandro Calvo, en la JGPA. Se mostró partidario de fomentar una presencia de lobos «prácticamente nula» en aquellas zonas en las que hay ganadería extensiva. Para ello pidió que la revisión del plan de gestión de esta especie se lleve a cabo con el máximo consenso. Cuando se cumplen ya cinco años de vigencia del plan, el consejero aseguró que se está procediendo a analizar los datos acumulados durante este tiempo para proceder a una revisión que pretende acometer desde el máximo consenso político.
Respondía así a una pregunta formulada en el pleno de la Junta General por el popular Javier Brea. Este dijo que “donde hay lobos no puede haber ganadería” y pidió reducir los ataques que sufren las reses, establecer zonas libres de esta especie y revisar el sistema del pago de daños.
FOTO concentración ganaderos Junio 2018