El propietario de una ganadería situada en Porrúa (Llanes) se enfrenta a tres años de prisión y al pago de multas que suman los 36.500 euros por una construcción levantada en 2015 en una parcela no urbanizable situada dentro de su explotación.
Según el Ministerio Fiscal, el acusado solicitó en octubre de 2015 licencia municipal de obra para la construcción de un almacén en suelo no urbanizable, permiso que consiguió «faltando a la verdad y simulando firmas» con lo que llevó a cabo «una obra que era ilegalizable».
En la finca, según la Fiscalía, hay una nave que se levantó con licencia de almacén agropecuario al que posteriormente se incorporó un muro de contención de paneles de hormigón que no se ajusta a la normativa vigente, y otra de uso ganadero en la que se hicieron obras sin licencia o que no se ajustaban a la calificación del suelo en el que se hicieron «y en consencia ilegalizables».
El Ayuntamiento llanisco, al tener conocimiento el 23 de mayo de 2016 que no se daban los requisitos necesarios incoó un expediente de lesividad y presentó un recurso contencioso administrativo.
Según la Fiscalía, los hechos son constitutivos de un delito de falsedad documental en concurrencia con otro contra la ordenación del territorio con carácter continuado por los que pide tres años de prisión y multa de 14.600 euros para el propietario, así como otra de 21.900 para la propia explotación ganadera.
Además, pide que se le obligue a restituir la parcela a su estado original o a abonar los gastos en los que incurra el Ayuntamiento de Llanes si se ve obligado a ejecutar la sentencia.
El juicio se celebrará a partir del lunes, 17 de junio, en la sala de lo Penal número 3 de Oviedo.