Una fiesta asturiana con 75 años de historia ha decidido sortear un coche entre sus simpatizantes para conmemorar tan importante aniversario. La nueva directiva de la Sociedad de La Peruyal ha retomado una idea que ya se llevó a cabo en el año 84: vender boletos para el sorteo de un coche. Eso sí, un coche muy especial, un coche vintage, pero en perfecto estado, igual que aquel Ford Fiesta que había sido sorteado en 1984, hace ahora 50 años. En esta ocasión se trata de un Renault 4 (un 4 Latas) que está como para participar en el Rallye Dakar.
La historia de La Peruyal comienza en 1949, en plena posguerra española. Y es especial porque comienza en un pequeño barrio (La Peruyal) de un pequeño pueblo (Arriondas) y en una pequeña y modesta peluquería regentada por una persona genial llamada Antonio Ichaso.
Este peluquero tenía un sueño: anhelaba una fiesta para su barrio. Una fiesta tradicional y alegre que reuniera a los vecinos en torno a la plaza, al son de gaitas y de tambores. Lo que Ichaso quería era celebrar la vida vecinal, esa que tiene una idiosincrasia tan marcada en los pueblos; grabar un día en el calendario en el que sólo hubiera que preocuparse de disfrutar comiendo, bebiendo y bailando.
Así que Ichaso compartió su idea con sus mejores amigos: “Linón”, Cuadriello, Tomás Cueto y Celso Rodríguez: todos juntos gestaron una pequeña gran fiesta que –a día de hoy- es una de las más importantes del oriente de Asturias. Está declarada de interés turístico regional y cuenta con uno de los mayores números de socios de todo Asturias.
Así crearon las Fiestas del Bollu y de La Peruyal, para la que trabajaron durante meses captando socios e ideas, celebrando rifas, anunciándose en el cine… una fiesta que fue un sueño hecho realidad y que en julio de 2024 cumple 75 años.
Cuentan los más viejos del concejo que la convocatoria inicial fue un éxito. Que ya aquel primer año Arriondas se llenó de música, trajes regionales, desfile de carrozas engalanadas, manteles con meriendas y muchos bailes al son de gaitas y orquestas. También dicen que, para el segundo año, la afluencia de gente a la fiesta fue inmensa, con vecinos llegados de concejos colindantes atraídos por todas las acciones “publicitarias” que Ichaso y sus compadres llevaron a cabo para sumar socios y adeptos. Cuentan que, durante los primeros años, Ichaso soñaba con llegar a los 1000 socios e imaginaba cuánto podría hacerse con ese número de gente afiliada a la fiesta… Actualmente la sociedad cuenta con cerca de 3000 socios activos en una localidad que ronda los 5000 habitantes.
El caso es que este año 2024, el último fin de semana de Julio (fecha estipulada para el evento) volverán por todo lo alto aquellas tradiciones implantadas hace ya 75 años por los fundadores, que han sido mantenidas por los socios como el primer día: el desfile de carrozas (con premios para las mejores), la merienda del “bollu preñau”, el festival folclórico, la gran verbena para locales y visitantes, la sidra y el sonido de las gaitas…
Además, todos los años se publica una revista (desde 1953) que documenta la tradición y evolución de la fiesta y del concejo: un anuario que ve la luz gracias a la colaboración desinteresada de socios y vecinos; un pequeño libro a todo color que hace un repaso -a través de fotos y escritos- de las distintas vivencias del lugar y que puede presumir con orgullo de ser una de las publicaciones más antiguas de Asturias.
Ahora, tras varios relevos generacionales, la actual junta directiva mantiene la tradición adaptándose a los nuevos tiempos. Y trabajan desinteresadamente por la fiesta con la misma ilusión que aquellos entusiastas soñadores que la forjaron: se siguen haciendo campañas para atraer nuevos socios, se organizan rifas, bingos, lotería… y para este aniversario han retomado la idea del sorteo del coche.
Además, acordes con los tiempos actuales, La Sociedad la Peruyal también dispone de página web y de redes sociales muy activas, con contenido que genera gran expectación entre los vecinos por su aire humorístico y entrañable. De esta manera, se sigue difundiendo la historia de la fiesta y se siembra ilusión por ella durante todo el año, además de promover entrevistas, fotos, videoclips o historias que hacen la espera por “el día del Bollu” más corta (tanto a los que viven en el pueblo como a los que están fuera).
En resumen: la fiesta del Bollu y de La Peruyal es, desde hace 75 años, un fin de semana de asturianía y folclore, de abrazos y reencuentros, de dormir poco y reír mucho, del regreso de los que están fuera y acoger al que no lo conoce. Un fin de semana para acudir a la plaza del pueblo sin más obligación que disfrutar, reencontrarse con amigos, bailar y beber y comer rico. Ese era el sueño de Ichaso y hoy sigue siendo realidad. Esa es la esencia de la fiesta: sencilla pero muy potente. El cariño que miles de vecinos ponen para cuidar y mantener esa esencia es –sin duda- el mejor homenaje a sus fundadores.
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