El departamento de obras del Ayuntamiento de Ribadesella ha cortado el acceso peatonal por la calle Santa Ana ante el peligro que supone la caída de cascotes procedentes de un viejo edificio en estado ruinoso, en pleno Camino de Santiago. Los desprendimientos proceden de una de las fachadas del inmueble que cruza la calle creando un pasadizo. “Tuvimos que cerrarla porque hay un riesgo alto para los viandantes, aunque esperamos que el corte sea por poco tiempo”, dijo el concejal de obras, José Luís Díaz Bermúdez.
El primer cierre preventivo se realizó la semana pasada con unas vallas de plástico, pero al comprobar que muchos vecinos seguían haciendo uso de la calle, esta semana se procedía a precintarla por completo con unas vallas metálicas que impiden el paso, “para que la gente no pueda apartarlas y actúe con responsabilidad”, añadió.
A su vez, el Ayuntamiento de Ribadesella ha requerido a la propiedad del inmueble para que actúe reacondicionando y protegiendo la zona en la que se producen los desprendimientos. En caso de no recibir respuesta, “actuaremos nosotros por vía de urgencia porque el riesgo es evidente”, aseguró el concejal de obras. El corte está comprendido entre la capilla y la plaza de Santa Ana.