La playa de Ribadesella ha recuperado parte de su normalidad tras los episodios de contaminación orgánica vividos desde el pasado viernes. El servicio de salvamento inició la jornada laboral de este lunes con bandera amarilla, bandera de precaución debido al estado de la mar y en mejores condiciones sanitarias que los tres días anteriores, aunque la zona centro del arenal sigue cerrada al baño.
Los análisis que provocaron el cierre parcial para el baño del arenal de Santa Marina se realizaron el lunes 5 de agosto y fueron comunicados al Ayuntamiento el miércoles 7. “Ese día nos dijeron que estaban un poco alterados y se tomaron nuevas muestras cuyos resultados nos comunicaron el viernes recomendando el cierre de la zona centro de la playa”, explicó Pablo García, concejal de playas.
La zona de Somos, próxima al puesto de salvamento, siempre estuvo apta para el baño y así sigue a día de hoy, aunque el mismo viernes se tuvo que cerrar al baño durante la tarde debido a la presencia de carabelas portuguesas. El sábado y el domingo se repitió la misma situación. Solo se mantuvo cerrada al baño la zona centro del arenal, unos 150 metros dentro de una playa de más de un kilómetro de longitud, habilitando espacios de refresco y baño en el resto debido a las altas temperaturas.
Pablo García considera que este tipo de situaciones no se pueden permitir ni se deben repetir, “porque lo que no podemos es seguir siendo la cloaca de la ribera del Sella, así que habrá que hablar con todo el mundo para que la playa de los Picos de Europa no sufra más episodios de estas características”.
No obstante, en esta ocasión el grado de contaminación ha sido menor que en los episodios vividos en 2020 y 2023. García cree que es debido al trabajo realziado este último año desde el Ayuntamiento enviando 75 requerimientos a propietarios de la zona de la playa que aún no estaban conectados a la red de saneamiento, llevándose a cabo este enganche en casi la totalidad de los casos. “El resultado es que la zona de Somos no tiene nada de contaminación y presenta niveles óptimos”, añadió Pablo García.
Al igual que muchos usuarios, García también manifestó su sorpresa con el hecho de que la contaminación no llegue a todos los rincones de la playa, “pero nosotros nos limitamos a seguir estrictamente las indicaciones de las autoridades sanitarias asturianas”, contestó.
El Ayuntamiento está en contacto permanente con el Principado de Asturias para tratar de encontrar solución a un problema que “se escapa de las competencias municipales y hace un gran daño a la imagen de Ribadesella”. Así, esta misma mañana se han vuelto a recoger muestras de agua en la playa para ser analizadas, de las que se conocerán los resultados en los próximos días.
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