Papeleras, bancos, señales y hasta árboles solían ser los objetivos fundamentales del gamberrismo vandálico que impera en las noches riosellanas. Pero su última felonía se ha salido del orden establecido. Esta vez han destrozado la balaustrada de uno de los miradores ubicados en el Area Recreativa de La Moría, en Ardines, el que ofrece una espectacular panorámica sobre el Malecón y la playa de Santa Marina.
Esta vez, el Ayuntamiento de Ribadesella ha anunciado a través de sus redes sociales que formalizará la pertinente denuncia para dar con los autores de estos últimos daños y de quienes acostumbran atentar contra el mobiliario urbano y el patrimonio de todos los riosellanos. En paralelo, debido a su peligrosidad ha asegurado la barandilla del mirador. También se han arrancado varias señales en la senda de Moru.
Visto 875 veces