Los ribereños del Sella han denunciado el lamentable estado de abandono en el que se encuentra la pasarela de madera que da acceso al pozo de La Faldeta, perteneciente al coto Sierra y ubicado en las inmediaciones del pueblo de Las Rozas y de la capilla de San Bartolo, en el concejo de Cangas de Onís. La riada del mes de noviembre la ha destrozado. Tiene tramos hundidos y faltan tantas tablas de madera, “que no se puede entrar salvo que seas una persona habilidosa para moverte por lugares difíciles y complicados”, afirmó el presidente de la Sociedad de Pescadores El Esmerillón, Antón Caldevilla.
Dada su situación, el Principado ha colocado señales y cintas que prohíben el acceso peatonal al coto. “Es algo increíble, pero cierto. El mejor pozo del coto tiene prohibido el paso y lo siguen cobrando todos los días. En lugar de arreglarlo, prohíben el paso. Esto es de juzgado de guardia”, censuró Caldevilla. De hecho, la sociedad que preside no descarta denunciar los hechos, “porque para mi es una estafa cobrar por un coto al que no se puede acceder”, añadió.
Antón Caldevilla también espera que las comunidades autónomas de Cantábrico se pongan manos a la obra para aclarar los motivos exactos de la escasez de salmones en todos los ríos de la cornisa. Está convencido de que el problema no está en los cauces fluviales sino en las capturas que realizan los barcos en alta mar, “así que por muchas limitaciones que nos pongan el problema no se va a solucionar”. Pidió que se hagan estudios pormenorizados al respecto.
