La pandemia sigue avanzando sin límites por todo el territorio nacional y también en Asturias, donde este viernes la Consejería de Salud informaba de 3 muertos, 117 nuevos positivos, 6 nuevos brotes en otras tantas residencias y la alerta naranja en Mieres.
Ya son ocho los municipios o localidades asturianas que se encuentran en alerta naranja. En el oriente, solo el concejo de Ponga, aunque la situación general que se vive en el conjunto del país está marcando el devenir de este largo fin de semana del Pilar que se nos avecina.
Toda la comarca está expectante ante lo que pueda ocurrir estos días. Unos por temor al contagio y otros en espera de turistas. Estos han comenzado a llegar, aunque a cuenta gotas. Las expectativas empresariales han descendido.
Según el presidente de ARITUR, la Asociación Riosellana de Turismo Rural, para estos tres días se espera una ocupación comprendida entre el 60 y 70 por ciento, muy lejos del lleno absoluto logrado en el último puente del Pilar hace dos años. “Incluso hubo gente a la que le dimos la vuelta y no pudo venir por falta de plazas libres”, recordó Sabino Martínez.
El pasado fin de semana fue “pésimo para todo el mundo” debido al mal tiempo y para este se espera un mejor comportamiento a pesar de que se anuncia caída de temperaturas e inestabilidad meteorológica, “otro factor negativo que se une a la pandemia”. No obstante, lo que mas preocupa a los propietarios de alojamientos rurales de Ribadesella es lo que pueda suceder en Madrid, “donde tenemos el principal nicho de clientes”.
