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Un pintor riosellano cuelga la brocha para ayudar a los damnificados por la DANA en Valencia

Piloña Ribadesella Sociedad

El convoy fletado por la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Piloña con ayuda y manos para trabajar junto a los damnificados por la DANA de Valencia regresa mañana a casa. Esta agrupación envió a nueve voluntarios y entre ellos a un pintor riosellano que ha colgado el rodillo y la brocha durante unos días para echar una mano a quien en verdad lo necesita. Hablamos de Enrique Gancedo, el que fuera concejal de Foro Asturias en el Ayuntamiento de Ribadesella y responsable de Protección Civil en este concejo. Ahora vive en Infiesto y es voluntario en la agrupación pilones, la mas veterana de la comarca.  

El equipo llegó a Valencia el miércoles por la mañana y desde entonces, tiene ubicada su base en la Universidad de Valencia, donde la Comunidad ha habilitado un pabellón para acoger a bomberos y voluntarios llegados de otras comunidades autónomas. Desde allí, han trabajado en diferentes lugares. Esta mañana lo hacían en Algemesí, población muy dañada por la DANA, situada a unos 30 kilómetros de Valencia, “un viaje de 40 minutos que puede convertirse en dos horas”, afirmó Enrique. 

Allí están haciendo de todo. Desde repartir alimentos hasta limpiar calles o achicar garajes. “Ahora mismo vamos a terminar un garaje de la Policía Local en el que empezamos a trabajar ayer, un espacio que necesitan para almacenar alimentos y medicamentos”, explicó. La expedición la integran 14 vehículos que regresan a Piloña mañana por la mañana. Bajaron cargados con alimentos, herramientas y “hasta un furgón refrigerado con leche fresca, solo con la leche donada por un ganadero de Piloña”.

Y regresan a rebosar de energía, porque el voluntariado también da muchas satisfacciones.  “Estamos recibiendo muestras de agradecimiento continuamente, la gente tiene puestos de café y comida en la calle para los voluntarios. Una mujer nos paró ayer para comunicarnos la hora en la que pensaban repartir una paella. La verdad es que te complace poder ayudar a esta gente”, añadió Enrique Gancedo. 

La necesidad es muy grande. “Esto es impresionante. Una cosa es contarla y otra es vivirla. Las calles están llenas de enseres y muebles, los coches apilados unos encima de otros. Es impresionante. El sonido de las sirenas es constante. Ojalá se puedan recuperar lo más pronto posible, pero no va ser cosa de dos días. Hace falta mucha ayuda”, contó esta mañana en los micrófonos de COPE Ribadesella. 

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