El canteru de Sebreñu, Abelardo Llano del Valle, completó esta mañana la colocación de la mano de piedra que había perdido uno de los osos que custodian La Fuentina, en el paseo de La Grúa de Ribadesella. La figura permanecía sin ella, desde el mes de enero cuando se le desprendió por causas desconocidas.
El Ayuntamiento de Ribadesella encargó el trabajo de restauración a Abelardo Llano, que realizó una mano nueva con piedra arenisca que colocó esta misma mañana ya que aún conservaba el molde realizado para elaborar el mismo elemento con la técnica de puntometría, en la restauración que se llevó a cabo en el año 2013, un trabajo que realizó entonces junto al ceramista Juan Garal.
En aquel momento también hubo que rehacer la mano del otro oso y los hocicos de las dos figuras. “Fui haciéndolo en varios momentos, porque son piezas que dan algo de guerra por la técnica que se utiliza”, comentó el canteru que ha realizado este trabajo de forma totalmente desinteresada. En la colocación contó con el apoyo de personal municipal del departamento de Obras.
La Fuentina luce ya como siempre gracias a las profesionales manos de Abelardo Llano. Desde el Ayuntamiento de Ribadesella se quiere agradecer el “magnífico” trabajo realizado por Llano y su gesto “altruista”, así como la labor de las personas que han estado pendientes y dispuestas a colaborar en esta acción de restauración de un elemento arquitectónico tan valorado en Ribadesella como es La Fuentina.
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