El Ayuntamiento de Ribadesella quiere introducir algunas modificaciones en el Plan de Sostenibilidad Turística del concejo para mejorarlo y evitar consecuencias no deseadas. Entre otras cosas, la coalición de Gobierno pretende evitar la peatonalización total de la calle Comercio, tal y como viene recogido en el segundo eje del plan. Este prevé desarrollar un plan de movilidad del casco urbano que incluye la reforma de la calle Gran Vía para situar la calzada al nivel de las aceras y la peatonalización total de la calle Comercio.
PP y FORO pretenden desarrollar la mejora de ambas calles a lo largo de 2024, aunque aún están valorando una solución definitiva para la calle Comercio. “Su peatonalización total podría tener alguna consecuencia negativa para el resto del casco urbano, así que entre Consejería y Ayuntamiento lo vamos a estudiar detenidamente”, afirmó el alcalde. La solución podría pasar por convertirla en una calle semipeatonal, “pero nunca su peatonalización total”, añadió Paulo García.
Así se planteó este martes, durante el encuentro que el regidor mantuvo en Oviedo con la vicepresidenta y consejera de Turismo, Gimena Llamedo. Ambos mandatarios acordaron firmar el convenio de colaboración del plan antes de que finalice el año para echarlo a rodar con el año nuevo. La inversión total, de 1.822.500 euros, fue aprobada el 24 de noviembre pasado. Ahora solo falta la firma y ponerse a licitar cada una de las quince actuaciones previstas en el plan, “un gran reto para el Ayuntamiento ya que servirá para cambiar el concejo, un plan ambicioso que marcará un antes y un después en esta villa”, añadió Paulo García.
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