El Ayuntamiento de Ribadesella y la UNED Asturias han rubricado el acuerdo que permitirá organizar un nuevo Curso de Verano sobre Arqueología Prehistórica en el concejo donde se asienta el principal yacimiento paleolítico del Principado. Tras el éxito del año pasado, el Centro de Arte Rupestre Tito Bustillo de Ribadesella acogerá un nuevo curso del la UNED, “aunque con un programa diferente y visitas a las principales cuevas del concejo”, destacó el director el campus asturiano Carlos Menéndez.
El anuncio se hizo oficial durante la presentación del número XIX de la revista Entamu, dedicado monográficamente a los yacimientos arqueológicos del valle del Sella. En sus 400 páginas se recogen doce trabajos en los que han participado 70 autores. Es una “visión actualizada” sobre los yacimientos históricos de Collubil, El Buxu, Los Azules, Cova Rosa, El Cierro, Les Pedroses, La Lloseta, Tito Bustillo y La Llosa de Llendón, y sobre yacimientos descubiertos en épocas más recientes, como El Sidrón, Sopeña, La Güelga y el castro de Antrialgo.
En líneas generales, según Jesús F. Jordá Pardo, uno de los cuatro editores de la revista, “se trata de un compendio de conocimiento, de fácil acceso a la población”. Cualquier puede tener puede descargarse la revista de forma gratuita en la web oficial de la UNED. Pero, además, el Ayuntamiento de Ribadesella distribuirá en la Casa de Cultura y en la Oficina de Turismo un folleto explicativo en el que se incluye un código QR de acceso directo a trabajo, titulado ‘Descendiendo el río Sella. Una (re)visión de la Arqueología Prehistórica del Valle del Sella (Asturias, España)’.
El primero de los doce trabajos, realizado por el Colectivo Espeleológico L’Esperteyu, bajo la coordinación de Ramón Obeso Amado, recoge información sobre la exploración llevada a cabo en cerca de 100 cavidades relacionadas con el río Sella y sus afluentes, Güeña, Piloña y San Miguel, prestando especial atención al Macizo de Ardines, en el concejo de Ribadesella. En este territorio, sorprenden las siete cavidades existentes en la Peña Pagadín. Así lo manifestó el alcalde, Ramón Canal. La monumental roca está completamente horadada, es como “queso gruyer”, añadió Jordá. Y entre esas cavidades destaca una, Cova Rosa, en Sardéu, con signos evidentes de haber sido lugar de habitación de diferentes grupos prehistóricos.
A su vez, en el valle del sella existen once yacimientos que están perfectamente intercomunicados. Desde El Sidrón hasta Collubil, pasando por Sopeña y acabando en Tito Bustillo. “Estamos hablando de la zona de la península ibérica donde mas investigaciones arqueológicas se están haciendo”, destacó Esteban Alvarez-Fernández, investigador de la Universidad de Salamanca que también es editor de la revista y autor de las intervenciones llevadas a cabo en las cuevas de El Cierro (Fresnu) y Tito Bustillo (Ribadesella).
Entre los autores de los trabajos también están Marcos de la Rasilla (El Sidrón), Ana Pinto (Sopeña), Mario Menéndez (La Güelga y El Buxu), Josñe Manuel Quesada (Collubil), Alberto Martínez-Villa (La Lloseta y Les Pedroses), David Alvarez-Alonso (Los Azules), además de José Antonio Longo Marina y Juan Ramón Muñiz Alvarez (La Llosa de Lledón y el Castru de Antrialgu).
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