
La biblioteca del Monasterio de San Pedro de Villanueva, del Parador Nacional de Turismo de Cangas de Onís, ya tiene nombre oficial. Desde el pasado viernes lleva el nombre de la parraguesa Dulce María Prida Vega, escritora, guía turística y gran agitadora cultural en la comarca, sobre todo organizando durante un buen número de años los Encuentros Culturales del Monasterio.
Por razones de aforo, el acto de reinauguración y de homenaje póstumo a Dulce se celebró en la iglesia de Villanueva de Cangas con la presencia de la Escolanía de Covadonga y otra serie de amigos que interpretaron algunas piezas como Chema Aladro, Martín Martínez y la soprano afincada en Ribadesella, Dorothy Gillett, entre otros., todo ello conducido por Angel Lueje.
Según explicó el director del Parador, Ignacio Bosch, el acto fue “un reflejo de lo que a ella le apasionaba, un acto ligado a la música y el arte, en una tarde entre amigos que sirvió para poner en valor todo el legado que Dulce dejó a la comarca en cultura y pasión”, Desde el pasado viernes, esa biblioteca lleva su nombre para recordarla siempre.
En el acto estuvieron presentes la teniente alcaldesa y la concejala de cultura de Cangas de Onís, Marifé Gómez y Mónica Gutiérrez respectivamente, además del alcalde de Parres, Emilio García Longo, entre otros.