En plena pandemia sanitaria provocada por el coronavirus, en el pueblo marinero de Lastres ha surgido otro problema de salud pública que está crispando y alarmando a sus vecinos. Un problema motivado por la proliferación de gatos callejeros. Según denuncian algunos ciudadanos, han aumentado los cebaderos y con ello la población felina silvestre.
Según nos ha contado esta mañana una vecina de Lastres, “son numerosos los gatos que campan por los barrios mas céntricos del pueblo”. Pero lo peor, es su apariencia física, ya que presentan “un estado de descuido, con heridas y mal aspecto”. Como uno de los cebaderos está “pegado a la puerta del cementerio”, los gatos se han adueñado del campo santo esparciendo sus deposiciones entre las tumbas.
Otro cebadero está situado “en la puerta de la carnicería, con los olores que ello genera, algo que no es nada agradable”, denunció esta misma vecina. Pidió que se deje de alimentar a los animales callejeros y se haga caso a las indicaciones municipales. “El Ayuntamiento de Colunga ha colocado carteles y bandos prohibiendo estos cebaderos, pero duraron lo que dura un suspiro, porque la gente los arranca”, añadió.
Como consecuencia de esta situación, el pasado sábado dos dotaciones de bomberos acudieron a las diez de la noche a Lastres a rescatar a un pequeño gato que algún desaprensivo había tirado, “metido en una bolsa de plástico”, a los contenedores de reciclaje. Mientras unos los alimentan, otros intentan deshacerse de ellos de la peor manera posible. Al final no solo se está generando un problema de salud pública sino que, además, se está creando un posible conflicto ciudadano.
Noticias relacionadas
Entrevista VECINA LASTRES (Gatos Callejeros) y REPORTAJE OSEZNA SABA
Una protectora de animales de Llanes gestionará las colonias de gatos callejeros de Lastres y Colunga