
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha pedido este martes al Gobierno asturiano algo más de tiempo para comprobar la eficacia de las medidas adoptadas para frenar la segunda ola de la pandemia antes de recurrir al confinamiento domiciliario de la población que requirió ayer el Principado.
Así se lo ha trasladado durante la bilateral que este mediodía ha mantenido con el consejero de Salud asturiano, Pablo Fernández (foto), en la que los equipos de ambas administraciones han analizado conjuntamente la situación epidemiológica de Asturias y su presión asistencial, según ha informado el Ministerio de Sanidad.
Por parte del Principado, se ha explicado las nuevas medidas adoptadas a fin de disminuir la incidencia, que es más del triple que hace un mes, pasando de los 119 casos por cada cien mil habitantes que había el 29 de septiembre a los 421 ayer, lo que también se ha dejado notar en la carga asistencial.
Fue por ello que Asturias acordó este lunes cerrar «toda la actividad económica no esencial» a partir del miércoles, establecer el toque de queda a las diez de la noche, dos horas antes del actual, y pedir al Ministerio de Sanidad que autorizase un confinamiento domiciliario durante 15 días para tratar de contener al virus, una solicitud que le fue denegada.
En el Ministerio siguen considerando que debe darse tiempo aún para ver los efectos de estas medidas y comprobar su eficacia en la evolución de la pandemia «antes de dar nuevos pasos».
Tras la de hoy, ambas partes han acordado celebrar una nueva reunión bilateral de seguimiento en próximas fechas, que se sumará a a la celebración los miércoles con este mismo objetivo del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.
El ministro ya descartó ayer decretar confinamientos domiciliarios en los próximos días al confiar en que, con las medidas incluidas en el nuevo estado de alarma, se podrá controlar la evolución de la pandemia.
En el encuentro bilateral de este martes han participado también la secretaria de Estado de Sanidad, Silvia Calzón; la directora general de Salud Pública del ministerio, Pilar Aparicio, y el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón.
Asturias cerrará a partir de mañana todas las actividades no esenciales, que deberán detallarse en una resolución que aún debe publicarse en el Boletín Oficial del Principado (BOPA).
En principio, se cerrarán durante medio mes las grandes superficies y centros comerciales, las tiendas minoristas que no se consideren esenciales, los espectáculos públicos y actividades recreativas, la Universidad, salvo para prácticas o enseñanzas que no puedan hacerse por teleformación, los congresos, los seminarios y reuniones de profesionales o de propietarios.
Sí que permanecerán abiertas las tiendas de alimentación, las farmacias y parafarmacias, los establecimientos sanitarios y veterinarios, las ópticas, los estancos, la prensa, las gasolineras, los talleres mecánicos, la ITV, las tintorerías y peluquerías, el comercio por internet o la distribución de comida a domicilio.