Este mes de noviembre ha arrancado con una fuerte borrasca, cargada de fuertes vientos. Un vendaval meteorológico que viene acompañado de otro empresarial, porque la Finca Villamaría de Cangas de Onís cuenta desde ayer con nuevos gestores. La familia del Grupo El Campanu, con sede en Ribadesella y orígenes cangueses, se hace cargo de este emblemático establecimiento asumiendo su gestión e iniciando una gran aventura.
La inauguración por parte de los nuevos gestores está programada para el jueves 16 de noviembre. ese día fiesta inaugural, para abrirlo al público el viernes 17. El nuevo equipo estará integrado por una plantilla inicial de unas 15 personas que se reforzarán con la contratación de extras para cubrir los eventos y celebraciones en los que lleguen en el futuro. De cara al verano, la plantilla podría crecer a los cuarenta trabajadores teniendo en cuenta la incorporación de nuevos espacios como una zona chillout.
Las sensaciones iniciales son “muy buenas”, según ha manifestado el portavoz del Grupo El Campanu, Manuel de la Vega Cueto. “Estamos muy ilusionados con este emblemático establecimiento, esto es como tener el Bernabéu en nuestras manos, esto es una liga superior y un proyecto muy ambicioso para nosotros que nos permite volver a Cangas de Onís después de todos estos años en Ribadesella y Gijón”, añadió De la Vega Cueto.
Para empezar, esta nueva aventura, la Finca Villa María del Campanu ha comenzado a comercializar la que será su primera Cena de Nochevieja para despedir el 2023 con una fiesta cotillón de lujo. Esa noche espera reunir a alrededor de 350 y 400 personas, “porque también damos la opción de barra libre”. El menú incluye barra libre hasta la seis de la mañana y quien prefiera comer en casa y disfrutar de la posterior fiesta en la Finca, debe pagar 50 euros por la barra libre con primeras marcas.
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