Los ribereños del Sella con residencia en las localidades de Vega de los Caseros (Parres) y Villanueva (Cangas de Onís) se concentraron este mediodía sobre el puente de Villanueva para protestar, una vez más, contra la restrictiva normativa pesquera.
El motivo estas que claro. A partir de mañana martes, 2 de mayo, ese tramo de río quedará totalmente acotado hasta el último día de temporada, hasta el 15 de julio. Desaparece la zona libre de pesca y «están echando para casa a la gente mayor y los críos de estos pueblos con gran tradición pesquera», censuró el Presidnete de El Esmerillón, Antón Caldevilla. Este cree que la actual normativa no se ha hecho para mejorar las condiciones piscícolas de los ríos, sino «para tocar las narices a los ribereños, porque hay formas de hacer lo mismo pero de otra manera».
Entre tanto, la temporada salmonela sigue muy baja de capturas. Sabemos que este lunes festivo se han pescado otros dos salmones en el Narcea, el quinto de su cuenta particular. El Cares acumula dos después del que fue pescado el sábado en Monejo, un pez de 3,200kg. Y el Sella sigue con uno, con el Campanu de Asturias pescado hace un mes. Este río acumula cuatro semanas consecutivas en blanco, sin capturas.
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